¿Cuál es la definición de eficiencia energética y cómo se determina?

La optimización del uso de energía para alcanzar unos niveles específicos de comodidad y servicio se conoce como eficiencia energética. Si un país tiene un nivel adecuado de eficiencia energética, puede asegurarse de que habrá suficiente energía para toda la población. Se traduce en un ahorro en el pago de las facturas de energía de los hogares.

Los gobiernos de todo el mundo han priorizado la eficiencia energética. Las fuentes de energía convencionales son limitadas, son cada vez más costosas y resultan en una dependencia del mercado internacional. Además, tienen un impacto significativo en el medio ambiente. A nivel empresarial y gubernamental, se están implementando cada vez más medidas e iniciativas para favorecer la utilización de energías renovables. La intención es que actúen como guías para ahorrar energía y, por lo tanto, contribuyan a una vida más sostenible en el planeta. En la Directiva 2010/31/UE, la Unión Europea establece que las nuevas viviendas deben tener medidas para reducir el consumo de energía y convertirlas en más sostenibles. Son las construcciones que se conocen como de consumo casi nulo.

¿De qué manera se puede calcular la eficiencia energética?

Uno de los estándares más importantes para medir y calcular la eficiencia energética es la Norma ISO 50001, aunque el International Performance Measurement and Verification Protocol (IPMVP) también es muy popular. El cálculo en los hogares se basa en el funcionamiento óptimo de los equipos y las instalaciones en comparación con un consumo bajo.

En otras palabras, para determinar si una casa cuenta con una eficiencia energética adecuada, es necesario considerar varios indicadores que miden el uso de energía durante un período de tiempo determinado. La intensidad de la energía está relacionada con la eficiencia energética, aunque de manera inversamente proporcional: cuanta más intensidad energética utilicemos en el hogar, menor será la eficiencia eléctrica.

¿Por qué invertir en eficiencia energética en tu hogar?

Apostar por una estrategia de eficiencia energética en el hogar puede contribuir a mejorar el planeta o a reducir nuestra factura de la luz hasta en un 40%. Estos beneficios incluyen un menor ruido en las habitaciones (gracias a que se pueden cerrar las ventanas y se reduce la necesidad de utilizar aparatos de aire acondicionado), mejorar las condiciones de habitabilidad de la vivienda (con temperaturas más constantes durante todo el año) o disfrutar de ciudades más limpias (algunos edificios son actualmente un gran foco de contaminación).

Para lograr una vivienda con eficiencia energética, es necesario llevar a cabo una serie de medidas que son accesibles para todos. Uno de los métodos para lograr una climatización adecuada es mediante el uso de un sistema de ventilación mecánico de doble flujo, que permite que las habitaciones permanezcan estancas entre sí. Esto no solo tiene un costo menor, sino que también beneficia nuestra salud al eliminar el aire contaminante y agregar aire proveniente del exterior, previamente filtrado.

Otro objetivo importante es lograr un consumo óptimo de los electrodomésticos, por lo que se recomienda comprar electrodomésticos con etiquetas A+, A++ y A+++. Una bombilla de bajo consumo, por ejemplo, puede costar dos veces lo que una bombilla normal, pero su vida útil puede triplicarse, lo que resulta en un ahorro significativo a largo plazo. Además, puede optar por microondas, lavavajillas y hornos eficientes. Los ventiladores de techo pueden reducir de manera significativa el consumo eléctrico en el caso del aire acondicionado, cuyo consumo suele ser elevado.